Getting your Trinity Audio player ready...
|
Descargo de responsabilidad: fallamos en nuestro pronóstico respecto al senador Rubio, se sabe que el senador por Ohio, J.D. Vance, es el actual candidato a la vicepresidencia.
Mientras el Partido Demócrata sigue en crisis, con sus partidarios pidiendo a Joe Biden que se retire de la contienda tras un desastroso debate y dudas respecto a su salud y edad, el Partido Republicano y la popularidad de Donald Trump aumentan en medio de una convulsa carrera electoral estadounidense.
Desde hace meses, se ha especulado sobre quién será el vicepresidente que acompañará a Trump a la Casa Blanca. Se han dado varios nombres, y el mismo Trump ha asegurado que de esos algunos están «bajo consideración». Esta estrategia de campaña le ha ayudado a quitar del foco y titulares de sus juicios legales en proceso.
Entre los políticos fuertemente voceados para acompañar a Trump están el senador por Ohio, James David Vance, el gobernador de Dakota del Norte, Doug Burgum, y el senador por Carolina del Sur, Tim Scott, además del senador por Florida, Marco Rubio, que tiene grandes posibilidades, aquí en Newsyman consideramos y apostamos que será su compañero presidencial.
Rubio se convertiría en el primer latino en ser vicepresidente, además de ser visto como una figura del establishment republicano. Elegirlo como compañero de fórmula será una opción sensata y más tranquila para alguien como Trump. El «pequeño» Marco, apodado así por Trump durante la campaña electoral de 2016, goza de una modesta carrera política y aportaría a consolidar definitivamente el voto hispano, el voto conservador e incluso el de los indecisos. También ayudaría a unir a diferentes facciones del partido, incluyendo a aquellos que son críticos con Trump. Asimismo, Trump garantizaría contribuciones financieras tales como un aumento de donantes hispanos y figuras cercanas a Rubio como el multimillonario Ken Griffin.
Trump estaría demostrando que esta vez su administración estará más enfocada en América Latina, una región descuidada durante el gobierno de Biden, en la que China y Rusia ya se han estado afianzando más. Por otra parte, Rubio aportaría equilibrio a la fórmula republicana, siendo una figura más joven, ayudaría con una visión más latina en la Casa Blanca. Su experiencia aportará a establecer nuevas etapas en las relaciones entre Estados Unidos y sus vecinos más incómodos en Latinoamérica como Cuba, Venezuela o Nicaragua.
Marco Antonio Rubio es actualmente senador por Florida desde 2011. Hijo de inmigrantes cubanos, se graduó en Ciencias Políticas por la Universidad de Florida y en Derecho por la Universidad de Miami. Fue presidente de la Cámara de Representantes de la Florida. Tiene experiencia en política exterior y en la primera administración de Trump estuvo considerado para ser secretario de Estado. También habla inglés y español de manera fluida.
Rubio ya es conocido en el ámbito político estadounidense; se presentó como candidato a la presidencia en las primarias del Partido Republicano en 2016, para después abandonarla y apoyar a Trump. Según el comparador de apuestas OddsChecker, JD Vance y Doug Burgum están empatados para ser elegidos como compañero presidencial en primer lugar, detrás de ellos está Rubio.
Donald Trump anunciará oficialmente a su candidato a la vicepresidencia esta semana. El anuncio puede darse en cualquier momento, quizá este sábado en su evento de campaña en Pensilvania, o tal vez lo haga a través de su cuenta de Truth Social, del cual es dueño. Sea como sea, este lunes 15 de julio comienza la Convención Nacional Republicana en Milwaukee, Wisconsin, en la que se ratificará la nominación de Trump con los 2231 delegados que obtuvo para ser el candidato oficial del Partido Republicano.
Tradicionalmente, en las últimas décadas los candidatos presidenciales han anunciado a su acompañante como vicepresidente días previos a las convenciones nacionales. Es probable que Marco Rubio sea el elegido por Trump; no obstante, Trump puede sorprender escogiendo a cualquier otro político que ni siquiera figura en la lista corta de candidatos a la vicepresidencia del Partido Republicano. Muchas veces, Trump es impredecible.
Personalidades como Bill O’Reilly, al ser preguntado por NewsNation, manifestaron que están «90% seguros» de que Marco Rubio será el vicepresidente de Trump. El martes 9, en su mitin de campaña en Doral, Miami-Dade, con Rubio presente, Trump dijo a los asistentes refiriéndose a los medios que cubrían el evento: «probablemente ellos piensen que voy a anunciar que Marco será vicepresidente». A su vez, hay un video que Rubio ha publicado últimamente en su página oficial que tiene un estilo muy presidencialista, un dato curioso es que sus interacciones en su cuenta de X se han reducido drásticamente, no sabemos a qué se debe ese silencio.
No todos están a favor de la candidatura de Rubio. Para el hijo mayor de Trump, Donald Trump Jr., conocido mayormente como Don Jr., no está del todo de acuerdo en que el senador Rubio sea vicepresidente de su padre. A través de su pódcast, aseguró que en el Senado los republicanos menos conservadores o trumpistas podrían unirse a los demócratas para dar un impeachment a su padre y poner a Marco Rubio como presidente. «Rubio garantiza otro impeachment», resaltó Don Jr., quien además es amigo cercano de JD Vance y abiertamente ha manifestado que quiere verlo como el compañero de fórmula de su padre.
Un punto importante a considerar es que la Duodécima Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos prohíbe a los electores votar por un candidato a presidente y su vicepresidente si ambos son del mismo estado. Rubio nació en Miami y Trump en Nueva York. Sin embargo, mientras Rubio sigue viviendo en Florida, Trump cambió su residencia oficial de Nueva York a Florida en 2019. Este tipo de problemas ya han ocurrido en el pasado, como fue el caso con la candidatura presidencial de George W. Bush en el 2000, que se solucionó cuando su compañero de fórmula, Dick Cheney, cambió su residencia de Texas a Wyoming. Seguramente el equipo de campaña de Trump ya se ocupó de ello.